así esta la cosa
la cosa, no?
esa pelota gastada del potrero
con la que rompía
los vidrios
de las ventanas de las casas
los huevos
de los vecinos de esas casas
pateábamos todo el día
en una calle cortada
vacía de taxis y colectivos
el arco
dos postes imaginarios sobre la pared
del regimiento de granaderos a caballo
los milicos
haciendo guardia en el portón
se les sentían las ganas
de ametrallar nuestra defensa imbatible
sobame la gorda
les gritó esa vez Diego
y nosotros no entendimos
hasta unos años mas tarde
sin darnos cuenta
en qué momento preciso
ahí estábamos todos
tirándoles con los chasqui boom
que acopiamos en navidad
la guerra
la teníamos ganada
los militares tenían menos movimiento
que un playmóvil
encerrados
en su caja de juguete
tuvieron que pedir
refuerzos a la gorra
que tiene la autorización
firmada por el pueblo
para bajarnos
como si fuésemos patitos de plástico amarillo
en un juego de kermés
niños
de 14 15
16 años
con esposas
boca abajo
aspirando la mugre
un forro usado
que se parecía a esas máscaras
que caen del techo de los aviones
para que no te falte el aire
cuando recojen tus pedacitos
uno
a esta altura
de la superficie
tiene revelaciones
comprende
la cosa, no?
en sus pequeños detalles
y sabe
que con esos zapatos
los chorros
llevan ventaja
que el Estado entonces
debería uniformarlos
como si fuesen maratonistas
darles jabalinas
para que los cacen desde lejos
mamá papá
lo hice por la causa
por la patria
por la patria
por la patria
que no quiero terminar
asexuado
como ustedes
hasta el cajón de las verduras de la heladera
tiene más vida
más
color
ma
ma
no te preocupes ma
no llores
llores
lo hice y acordate
de traerme mi almohada
que si no
ya sabés
sueño pesadillas
domingo, 5 de abril de 2009
Suscribirse a:
Entradas (Atom)